La mayoría de los centros educativos que solo imparten FP se denominan Centros Integrados Públicos de Formación Profesional (CIPFP). Estos centros, a diferencia de los Institutos de Educación
Secundaria (IES), no son gestionados por un Consejo Escolar, sino por un “Consejo Social”.
En los IES, el Consejo Escolar es el encargado de gestionar el centro; mediar en los problemas que puedan surgir; paliar los escasos recursos que
recibimos intentando mejorar, en la medida de lo posible, la calidad de la
enseñanza; etc. En estos consejos, tienen cabida todxs lxs alumnxs, profesorxs, madres y padres, que
hayan presentado "candidatura" y sido elegidos de una manera
democrática dentro del centro educativo. En los CIPFP, en lugar del
Consejo Escolar, existe el llamado “Consejo Social”, formado por:
- Un miembro de la dirección del centro (director, jefe de estudios,
vicedirector…)
- Representantes del profesorado
- Representantes de los trabajadores del centro
- Representantes de las empresas de la zona
La forma de funcionar que se propone dentro de los CIPFP plantea los
siguientes problemas:
- Poca
representatividad de los padres y madres y, sobre todo, de lxs alumnxs del
centro. En el Consejo Social, dejan al margen cualquier funcionamiento
democrático en la resolución de conflictos internos.
- Las empresas privadas están dentro del órgano de gestión
del centro a través de
los representantes que éstas hayan elegido. Su principal objetivo es
obtener beneficio económico, y por ello anteponen decisiones que
pueden resultar contraproducentes para la gestión de los centros educativos,
privando así a lxs alumnxs de tener en su centro la mayor calidad
educativa posible dentro de este panorama devastador.
Desde AES, queremos expresar nuestra total disconformidad con el este tipo de
funcionamiento que se plantea dentro de los CIPFP, donde los padres y madres, pero sobre
todo lxs alumnxs, quienes son —o deberían ser— los protagonistas en la toma de
decisiones de su centro educativo, no tienen voz ni voto. En su lugar, empresas
privadas adquieren un papel significativo, como ya explicamos en el punto dos,
asumiendo competencias y enfocándolas de la manera
más beneficiosa económicamente, sin tener en cuenta los
intereses del alumnado. Este funcionamiento se
impondrá en los IES, pues con la LOMCE, el Consejo Escolar pasa a ser un órgano
testimonial, y las decisiones del centro las tomará el director, elegido a dedo por la
Consellería de Educación.
Desde AES, os animamos a seguir luchando por una educación pública, democrática y de
calidad, en contra de modelos educativos como la LOMCE que nos condenan a un
sistema manejado por unos pocos mecenas, cuyo objetivo es extraer el máximo
beneficio económico. Es nuestro futuro y está en nuestra mano conseguir una
buena educación de todxs y para todxs.
¡Organízate y Lucha! ¡Únete a AES!
¡Por una educación pública, laica, gratuita, democrática y de calidad!
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada